DOLENCIAS
Ahora mi mundo es un túnel
allí me escondo y me transformo
mis pasos son de piedra
con ellos pisoteo hasta desangrar.
Mi piel es de barro y se agrieta,
mi corazón un escudo
hoy mi sangre es ceniza
y mi voz una llama.
Mis sentidos son espuelas
no entra nadie en mi casa
y en mis andenes reposa
la más profunda melancolía.
Mi cuerpo es arena y se desmorona
mis deseos son espadas
que cruzan vertiginosamente el tiempo.
Mis manos se han cerrado para siempre.
Comentarios
Publicar un comentario